José Bellido Nina
En Febrero de 2004 se publica el libro Hatun Willakuy. Versión abreviada del Informe Final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación.
A partir de allí, en el ámbito académico y periodístico se generaron debates en torno al contenido del texto. ¿Realmente fueron 23,969 peruanos muertos y desaparecidos? ¿Era necesario aplicar la metodología llamada Estimación de múltiples sistemas que dio como resultados 69,280 muertos? ¿El Partido Comunista Peruano - Sendero Luminoso (PCP-SL) es un partido político? ¿Sendero Luminoso es subversivo o terrorista? ¿Se habla de "conflicto armando interno" o resulta adecuado designarlo "guerra antiterrorista"? ¿La captura de los "senderistas" es una persecución política? ¿Es prudente difundir en las escuelas las conclusiones del IF-CVR sin mediar crítica? entre otras interrogantes. No hay duda que el diálogo en torno a estos temas permitirá encontrar la verdad, considerando que el documento no es perfecto ni constituye una fuente incuestionable.
El Informe Final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (IF-CVR) es una fuente de consulta que nos ofrece un panorama de cómo fue y es la violencia terrorista desde 1980 hasta hoy, puesto que el terrorismo continua, "narco-terrorismo" con "Artemio" en zonas como el Valle del Río Apurímac y Ene (VRAE).
Por otro lado. La entrada al escenario político nacional del Movimiento por Amnistía y Derecho Fundamentales (MOVADEF), desencadenó la necesidad de difundir más la crueldad o "guerra popular" de PCP-SL, precisamente porque este partido enarbola el "Pensamiento Gonzalo", y éste es base de MOVADEF.
El Estado a través del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) declaró fundado el desistimiento de la apelación que realizaron los seguidores de Abimael Guzmán. Además, la imposibilidad de acudir a un tribunal internacional.
Ahora nos fijamos que grupos de adolescentes y jóvenes seguidores de este pensamiento pretenden justificar el accionar terrorista. La respuesta general que se da es que no vivieron en esas décadas. Una excusa ingenua, porque evidencia la subestación a estas personas, pues documentación existe y se escribieron libros de sobra. Comprenden lo que pasó y se rehúsan a responder lo evidente. Cerrar la razón a la verdad es lo que ellos hacen. Negar lo que pasó constituye stultitia, estupidez, una renuncia a la razón y buen juicio. ¿O nadie sabe lo que pasó en Auschwitz?
En 1988 se realiza en Lima el I Congreso del PCP-SL a cargo del "presidente Gonzalo", allí Abimael Guzmán impone su conocimiento a los miembros, prohibiendo el cuestionamiento. El IF-CVR establece que [1]:
"El I Congreso discutió y aprobó el "pensamiento Gonzalo", por lo tanto, no sólo como la aplicación de una "verdad universal", que es el maoísmo, a la práctica concreta del Perú, sino también como pensamiento portador de "aspectos creadores" que lo podrían convertir en un "aporte a la doctrina revolucionaria mundial", condición necesario para convertirse algún día en "gonzalismo" (p.160).
El interés de Guzmán fue que su pensamiento, "fusión más alta", sea una doctrina (ismo). Este pensamiento es lo que él considera como la "Cuarta espada", pues las otras fueron Marx, Lenin y Mao Zedong. Él se consideraba como el guía de la "revolución mundial". Su pensamiento era el "universo todo" sin cuestionamiento; relegando el "pensamiento guía" de José Carlos Mariátegui.
"La prédica senderista señalaba, inequívocamente, que los derechos humanos son construcciones ideológicas al servicio del orden social existente y que, por lo tanto, no tiene ningún valor para orientar sus acciones. El PCP-SL negaba que los individuos tuvieran realmente derechos por el hecho de ser seres humanos y afirmaba que toda consideración humanitaria debía ceder ante la exigencia de tomar el poder para los sectores sociales oprimidos, a quienes decía representar.
El objetivo estratégico central de la acción senderista era la destrucción total de las estructuras políticas existente y su reemplazo por organismos sujetos al control directo del PCP-SL, como gérmenes de un régimen político alternativo en el que esta organización ejerciera un control total de los poderes del Estado. La estrategia preveía la acción restablecedora de orden de parte de las Fuerzas Armadas, que destruía violentamente muchas de las iniciales bases senderistas, y anticipaba una sangrienta y prolongada confrontación para dirimir superioridades" (p. 39.).
"El propio Guzmán, hablando de sí mismo en tercera persona, se encargó de sustentar la tesis de que él era portador de un nuevo tipo de pensamiento que permitía comprender "científicamente" los fenómenos sociales y políticos, así como del desarrollo de la lucha revolucionaria en el país, cuya propuesta podría ser útil también a otros países" (p.159).
¿Qué dice Guzmán en ese Congreso?:
"Cuando el documento sobre línea política general fue redactado y tratado en el CP he sostenido que el problema principal de este documento es el Pensamiento Gonzalo, me afirmo, ustedes han chocado anteriormente abiertamente, la mayor parte de los presente (…) el pensamiento Gonzalo es la integración creadora (no he venido a hablar de afanes, quien vea en esto afán personal es bastardía), es fusión de la verdad universal que hoy y en perspectiva es el maoísmo por el cual bregamos, chocan con el maoísmo. Nada es azar todo tiene su causa. De ahí que han chocado hasta con maoísmo, eso es el colmo de la mezquindad, de la estupidez de clase.
En síntesis, como cuestión trascendental y fundamental tendremos que aprobar la Base de unidad partidaria: Marxismo-lenisnismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo, Programa y Línea Política General, y eso es lo que vamos a aprobar, así se raje el cielo lo aprobamos, de eso estamos plenamente seguros"(p.157).
El estudio de Marx, Lenin y Mao Zedong, y el "pensamiento guía" de Mariátegui, constituyen el núcleo del actuar PCP-SL. Un núcleo que es la interpretación que Guzmán le da. Por ello, el "Pensamiento Gonzalo" tiene sus inicios en el Centro de Trabajo Intelectual Mariátegui que él fundó a partir de la autodenominación [2] de Partido Comunista Peruano-Sendero Luminoso en 1970 [3].
"El PCP-SL surgió en el contexto de las depuraciones ideológicas de la tradición revolucionaria marxista-leninista, en la que se alineó con las versiones de carácter dogmático y sectario que privilegian la noción de vanguardia como agente de la revolución y preconizan la vía de la violencia para realizarla.
El PCP-SL tomó de Lenin la tesis de la construcción de "un partido de cuadros selectos y secretos", una vanguardia organizada que impone por la vía de las armas la “dictadura del proletariado". De Stalin, figura menor entre los hitos históricos que reconoce el PCP-SL, heredó, sin embargo, la simplificación del marxismo como materialismo dialéctico y materialismo histórico y, además, la tesis del partido único y el culto a la personalidad. De Mao Zedong recogió la forma que la conquista del poder habría de adoptar en los países denominados semifeudales: una guerra popular prolongada del campo a la ciudad. Pero, sobre todo, el PCP-SL, tomó de Mao la noción de que la guerra popular es inevitable para llegar al socialismo y la idea de las "revoluciones culturales" como un paso necesario después del triunfo de la revolución" (p. 98).
El PCP-SL se base en "dos cuestiones importantes: a) su construcción como proyecto ideológico y pedagógico y b) su concepción absolutamente vertical y opresiva de la relación entre partido y sociedad, o entre partido y "masas" para usar su terminología" (p. 99). Esto se considera como el adoctrinamiento de estudiantes, profesores universitarios y maestros ayacuchanos. De ahí el inicio en la Universidad Nacional San Cristobal de Huamanga, la Universidad Nacional del Centro del Perú, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos o la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle – La Cantuta, por citar algunos. Incluso la amenaza de muerte y asesinatos para captar niños y adolescentes de las familias alto andinas, así como las organizaciones [4] que se crearon y todas estaban absolutamente subordinadas al partido que "lo decide todo, todo sin excepción". Más allá de los límites partidarios y los organismos de masas que controlaba, para PCP-SL no existía nada, salvo enemigos. Una vez iniciada la lucha armada, la "masa" debía someterse a la dirección científica del partido o pagar caro su insumisión" (p. 100).
Seguir a Mariátegui constituía reconstruir el partido comunista; es decir formar un pensamiento autocrático que rige todo y sea cabeza de la revolución mundial, para ello el inicio de la lucha armada constituye el paso para hacerlo. Para ello todos los miembros tenían que tener absoluta sumisión al partido, que en el fondo él dirigía y decidía. “Para hacerlo, impuso al "partido" ciertas definiciones radicales: a) convertir la ideología en una suerte de religión; b) concebir la militancia como purificación y renacimiento; c) identificar la acción revolucionaria con la violencia terrorista” (p. 101).
EL PCP-SL nombró a Guzmán como "presidente Gonzalo". Este reconocimiento fue porque él pretendía fundar un "nuevo Estado". “Desde fines de 1983, Abimael Guzmán era el "presidente Gonzalo”, por tres razones: por ser presidente del Comité Central, presidente de la Comisión Militar y presidente de la Comisión Organizadora de la República Nueva Democracia" (p.158) [5].
"La figura del "presidente Gonzalo" era cuasidiviva. Los militantes le sacrificaban su individualidad mediante “cartas de sujeción" en las que se comprometían por escrito a ofrendar la vida por la causa senderista y por su máximo dirigente, Esta adhesión incondicional producía entre los cuadros senderistas y su jefe una relación de matices religiosos. Un militante detenido en un centro penal limeño decía, al hablar de la significación histórica de su líder, que éste “colma el yo profundo, mueve el alma y encanta al espíritu; y da al individuo, como parte del conjunto, razón última de vivir. Yo como individuo no soy nada; con las masas y aplicando el pensamiento Gonzalo, puede ser un héroe; muriendo físicamente por la revolución, viviré eternamente"(p. 157).
El Plan del PCP-SL consistía en:
Primer plan: Inicio de la lucha armada (del 17 de mayo a diciembre de 1980).
Segundo plan: Desplegar la guerra de guerrillas (enero de 1981 a enero de 1983).
Tercer plan: Conquistar bases de apoyo (de mayo de 1983 a septiembre de 1986).
Cuarto plan: Desarrollar bases de apoyo (de noviembre de 1986 a julio de 1989).
Quinto plan: Desarrollar bases en función de la conquista del poder (de agosto de 1989 a agosto de 1992).
Sexto plan: Construir la conquista del poder (de septiembre de 1992 a noviembre de 1999) (p. 107).
El primer plan se inicia con el ataque a la localidad de Chuschi en Ayacucho, "cinco sujetos armados y encapuchados irrumpieron en el local donde se guardaban las ánforas y padrones para las elecciones nacionales del siguiente día y quemaron once de ellas” (p. 109). El asalto se da sin armas, lo que se denomina como "grupo armado sin armas"; es decir, cada miembro tendría que asumir la responsabilidad de conseguir su armamento, porque lo importante era la ideología. Con esta consigna en donde se comienza a asaltar pueblos y asesinan a sus pobladores para obtener recursos, a la vez que atacar los puestos policiales como en Vilcashuamán, dejando siete policías muertos el 22 de agosto de 1982. "El 3 de diciembre de ese año, cumpleaños de Abimael Guzmán, el PCP-SL hizo oficial el nacimiento del denominado "ejército guerrillero popular" (EGP)" (p. 109). En estos asesinatos participaron los destacamentos que formara Guzmán como la I Escuela Militar.
El segundo plan, se establece campañas denominadas Conquistar Armas y Medios, Remover el Campo con Acciones Guerrilleras y Batir para Avanzar hacia las Bases de Apoyo. Para esto se tomaron dos acciones:
"La primera fue el acuerdo de mayo de 1981 sobre la denominada “cuota” (de sangre) necesaria para el triunfo de la revolución. Guzmán incitó a sus militantes a “llevar la vida en la punta de los dedos” y a estar dispuestos a morir, pero, sobre todo, a matar por la revolución, y hacerlo de los modos más brutales. La vesania comenzó a manifestarse pronto en los ataques a puestos policiales –por ejemplo, arrojaron ácido en la cara de los guardias que defendían el puesto de Tambo, en la provincia ayacuchana de La Mar- y, sobre todo, en los dirigidos a las autoridades estatales y a los dirigentes comunales.
La segunda fue la decisión de "batir el campo" (y batir significa para el PCP- SL "arrasar y no dejar nada"), crear vacíos de poder y conformar los comités populares que constituían el germen del “nuevo poder” senderista. Fue en este preciso momento, al dirigir su violencia contra la sociedad campesina sobre la que pretendía asentarse, cuando el PCP-SL activó una fuente de descontentos que después no pudo controlar y sembró semillas de rebelión entre quienes quería que fueran sus aliados principales: los campesinos pobres de Ayacucho" (p. 111).
El tercer plan, involucra que a los "comités populares" que estaban a cargos de jóvenes, comisarios, y reemplazaban a las autoridades de las comunidades, imponiendo una economía autárquica. Estos comités populares conformaban la Base de Apoyo para la formación del "nuevo Estado", República Nueva Popular de Nueva Democracia. Guzmán era el presidente de la Comisión Organizadora de la República Popular Nueva Democracia. Esto involucraba más asesinato, porque requería de expansión territorial para crear "vacíos de poder". Por ello, "los grupos senderistas adoptaron una actitud mucho más coercitiva frente a los campesinos; en consecuencia, aumentaron los asesinatos de quienes se mostraban en contra, y se multiplicaron los asesinatos de autoridades comunales y campesinos acomodados identificado como "enemigos del pueblo". Ello implicaba el aniquilamiento selectivo de "notables" y la imposición de jóvenes sin formación política como mandos locales. Con frecuencia, éstos empezaron a mezclar la lucha por el "nuevo poder" con intereses personales o familiares. Su prepotencia provocó casi de inmediato el rechazo de la población" (p. 127).
Fue, entonces, cuando las comunidades comenzaron a asesinar a los senderistas, a causa de "secuestro de jóvenes, la interrupción de la vida cotidiana del campesinado, el ataque a su economía familiar y a la economía local, la obligación de asistir a asambleas y descuidar la atención de sus animales, la falta de libertad para movilizarse…" (p. 131) Aunado a ello que los senderistas rompieron las tradiciones de las comunidades donde los viejos tenían liderazgo y no lo jóvenes. En venganza PCP-SL comienza a asesinar a personas sin compasión. Allí es donde resalta los asesinatos en los pueblo como Lucanamarca, Huanta, Huancasancos, Sacsamarca, Iquicha, Uchuraccay, Accomarca, Umaro, Putis, Chungui, entre otros; y por el lado de la selva, Chanchamayo; los Asháninkas, quienes habían asesinado a senderistas por matar a los líderes de sus comunidades. O el protagonismo de Defensa Civil Antisubversiva (DECAS) en Apurímac. Así también lo senderistas asesinaron a personas para provocar al gobierno, pues en un acuerdo el PCP-SL establece: "Hay que inducir al genocidio al APRA", pues lo consideraban fascista. Por otro lado, y ya derribando torres de alta tensión eléctrica y colgando perros en las calles, los senderistas atentan contra el presidente del Jurado Nacional de Elecciones, Domingo García Rada, y la utilización de los "coches bomba" por primera vez cuando Fernando Belaúnde se reunía con el ex presidente argentino Raúl Alfonsín el 7 de junio de 1985, además del asesinatos, entre ellos del director del penal El Frontón, Miguel Castro Castro, miembros de la Guardia Civil, el cruel asesinato de María Elena Moyano o el atentado en el jirón Tarata.
El cuarto y quinto plan, fue adentrarse en otras ciudades, en especial Lima para tomar el poder; sin embargo, la entrada del ejército, la policía, y rondas campesinas generaron la muerte de senderistas y su número se fue reduciendo. Por ello, en Lima se comienzan a tomar asentamiento humanos y convencerlos de entrar a la “guerra popular” bajo un adoctrinamiento del "presidente Gonzalo" o "pensamiento Gonzalo". Ya hacía su protagonismo el movimiento "Socorro Popular" que apoyaba a PCP-SL en asuntos legales. Sin embargo, aprobado el "equilibro estratégico" que era una ofensiva, éste no tuvo resultados por las capturas terroristas y posteriores muertes. Este “equilibro estratégico” fue una repetición de las acciones en los años precedentes; es decir, en el terror del PCP-SL sobre inocentes en las comunidades campesinas y nativas.
La captura de Abimael Guzmán se produjo el 12 de septiembre de 1992 por el Grupo Especial de Inteligencia (GEIN) de la Dirección Nacional Contra el Terrorismo (DINCOTE), luego el supuesto plan que el sexto, no se dio porque Guzmán mando a rendirse; sin embargo, fue desconocido por Oscar Ramírez Durand, "Feliciano", es capturado en 1999. Sólo Florindo Flores Hala, "Artemio", está a cargo de los remanentes terroristas o narco-terroristas en el Alto Huallaga.
Este es el "pensamiento Gonzalo" que es la base del "lineamiento programático" de MOVADEF. Muerte y destrucción causan a quienes no creen en su “guerra popular”, pretendiendo ser partido político y autoridades gubernamentales. Ellos no tienen ningún signo de arrepentimiento. Y como lo vimos lo importante para ellos es la ideología, pero cada uno obtendrá, asesinando a personas, sus propias armas. Por ello, MOVADEF es un directiva de Sendero Luminoso, que mantiene firme el “pensamiento Gonzalo” aunque ellos digan que la "guerra popular" ya acabó, pero el anhelo de poder no anula la “revolución mundial” que ambiciona el comunismo.
El contenido del IF-CVR es mucho más amplio que las líneas escritas arriba. No exime de crítica lo investigado en el texto, pero, como escribí, constituye una fuente que cualquier ciudadano peruano, en especial los jóvenes, deben leer y criticar.
El fundamento de la democracia y un Estado de derecho son los derechos fundamentales o humanos. No se obtiene el bien común con la estrategia del terror.
* Imagen tomada de aquí.
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[1] Las citas son tomadas del Capítulo 2 Organizaciones subversivas de Hatun Willakuy. Versión abreviada del Informe Final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, Lima 2004.
[2] Un cuestionamiento a la IF-CVR es que llama al PCP-SL “partido político”. En realidad no hay ninguna inscripción que lo reconozca, sino que es la “autodenominación” que Guzmán le dio de PCP-SL porque fue dirigente del Comité Regional José Carlos Mariátegui con el eslogan de “Por el sendero luminoso de Mariátegui.
Se ha escrito que los “partidos políticos son, por excelencia, los agentes que llevan adelante la misión de transformar demandas sociales en acción política y a menudo los primeros en ser juzgados por los resultados. Es en este sentido que no sería exagerado rotularlos como los principales mediadores entre la sociedad y el Estado (…).
El hecho de que se basen en el principio de soberanía popular y la libre competencia por el poder, ha merecido su progresivo reconocimiento constitucional en numerosos países” Por otra parte, el sistemas de partidos “entendiéndolo más precisamente como subsistemas del sistema democrático en los que se producen relaciones de competencia y cooperación entre los partidos”. Ver CINGOLANI, Luciana, Partidos políticos y sistema de partidos, en AZNAR, Luis y De Luca, Miguel (compiladores), Política, cuestiones y problemas, Ariel, Buenos Aires 2007, pp. 165-192.
De ahí que consideramos que la “autodenominación” no obedecía, sino más que a la violencia o terror como estrategia militar y política, pues la negación de la existencia humana de los miles de asesinados por el PCP-SL, constituye un repudio a todos: Estado, gobierno, comunidad política y ciudadanos, matando a inocentes de forma aleatoria. Para Abimael los campesinos constituyen la “fuerza principal” y el proletariado el protagonista principal de las revoluciones.
[3] En 1960, el ámbito internacional del comunismo soviético y chino se sumergía en pugnas. El Partido Comunista de la Unión Soviética (PUCS) consideraba hacer un tránsito pacífico al socialismo, pero el Partido Comunista Chino, liderado por Mao Zedong, se aferraba a la violencia y la “guerra popular”. Así las cosas, en el Perú se dieron la misma división, lo que dio paso al PCP- Unidad para los prosoviéticos y el PCP-Bandera Roja para los prochinos. Este último se dividió en el PCP- Patria Roja conformada por jóvenes y bases, dejando a Abimael Guzmán con el líder Saturnino Pérez. A partir de 1969 se da disputa entre estos último, lo que genera que Guzmán abandone PCP-Bandera Roja, llevándose a pocos seguidores, según él, 12 militantes en Ayacucho y 51 en todo el país. Formando el Partido Comunista Peruano-Sendero Luminoso (PCP-SL).
[4] Estos movimientos fueron: Movimiento Clasista Barrial, el Movimiento Femenino Popular, el Movimiento de Obreros y trabajadores Clasistas, el Movimiento de Campesinos, Socorro Popular y El Diario.
[5] “No olvidemos que el Presidente Mao fue Presidente de ochocientos millones de habitantes y la repercusión de sus ideas fue mayor que las de Lenin; y él cumplió tres funciones: como Presidente (del Partido Comunista Chino), en el Ejército como Presidente de la Comisión Militar y como Jefe de Estado; por ello manejaba a cincuenta mil hombres para resguardo de la Dirección”. (p. 127). Si bien Abimael Guzmán emulaba a Mao, no lo seguía fervientemente porque Abimael dirigía su “guerra popular” de la ciudad al campo; no como Mao, del campo a la ciudad.